Las carreras con mayor proyección laboral hacia 2035 se concentran en salud, tecnología, ingeniería y áreas vinculadas a la sostenibilidad. Los datos del portal oficial Mi Futuro del Ministerio de Educación y estudios del SENCE confirman que la empleabilidad y los ingresos futuros estarán marcados por la digitalización, el envejecimiento poblacional y la transición energética.
El mapa laboral que se dibuja en Chile
Elegir una carrera universitaria nunca ha sido tarea sencilla. Hoy, además de la vocación, los jóvenes deben considerar las tendencias del mercado laboral. El país enfrenta transformaciones profundas: automatización en minería y comercio, crecimiento de la economía digital, y una demanda creciente de profesionales de la salud. El Instituto Nacional de Estadísticas proyecta que la población mayor de 60 años se duplicará en las próximas décadas, lo que explica por qué las carreras médicas y de apoyo clínico figuran entre las más seguras en términos de empleabilidad.
Salud: un sector que no se detiene
Las carreras de salud lideran las proyecciones. Medicina, enfermería, odontología y kinesiología muestran tasas de empleabilidad superiores al 90% en los primeros años de egreso. La razón es evidente: Chile envejece y requiere más profesionales para atender enfermedades crónicas y cuidados prolongados.
Incluso las carreras técnicas asociadas a la salud, como técnico en enfermería o imagenología, presentan alta demanda en regiones donde la infraestructura hospitalaria se expande. El desafío es que los aranceles en estas áreas son elevados, lo que obliga a las familias a evaluar cuidadosamente la inversión.
Tecnología y datos: el nuevo petróleo
La digitalización ha convertido a la informática en un campo estratégico. Carreras como ingeniería en informática, ciencia de datos y ciberseguridad se proyectan como esenciales para los próximos diez años. El auge del comercio electrónico y la necesidad de proteger infraestructuras críticas han disparado la demanda de especialistas.
El SENCE identifica la programación y el análisis de datos como competencias transversales requeridas en múltiples sectores. No se trata solo de trabajar en empresas tecnológicas: la minería, la banca y la salud necesitan expertos en sistemas digitales.
Ingeniería y transición energética
La ingeniería sigue siendo un pilar del desarrollo chileno. La diferencia es que ahora se orienta hacia la sostenibilidad. Ingeniería eléctrica, civil y mecánica se adaptan a proyectos de energías renovables, infraestructura resiliente y transporte limpio.
El informe “Futuro del Trabajo en Regiones” elaborado con datos del INE y ChileValora muestra que el sur del país concentra oportunidades en turismo sostenible y energías limpias, mientras que el norte enfrenta la automatización en minería. Esto significa que los ingenieros deberán combinar conocimientos técnicos con habilidades de gestión ambiental.
Ciencias sociales y educación: un espacio en transformación
Aunque menos visibles en los rankings de empleabilidad, las carreras de educación y trabajo social mantienen relevancia. La necesidad de docentes capacitados para enfrentar la brecha digital y de profesionales que acompañen procesos de inclusión social seguirá siendo alta. La diferencia es que los salarios en estas áreas tienden a ser más bajos, lo que plantea un dilema entre vocación y estabilidad económica.
Tabla de proyección laboral por área
| Área | Empleabilidad promedio al primer año | Proyección 2025-2035 |
|---|---|---|
| Salud | 90-95% | Crecimiento sostenido por envejecimiento poblacional |
| Tecnología y datos | 85-90% | Alta demanda en todos los sectores |
| Ingeniería | 80-85% | Expansión en energías renovables y obras públicas |
| Educación | 75-80% | Necesidad de docentes en regiones y formación digital |
| Ciencias sociales | 70-75% | Relevancia en inclusión y políticas públicas |
Fuente: Mi Futuro, Ministerio de Educación; SENCE; INE Chile.
Vocación versus mercado
El dilema eterno: ¿elegir por pasión o por empleabilidad? Un estudiante de Valdivia puede sentir que su vocación es la literatura, pero al revisar las cifras de empleabilidad descubre que ingeniería informática ofrece un futuro más estable. La tensión entre deseo y realidad se repite en miles de hogares. La ironía es que, en un país que necesita diversidad de profesionales, el mercado laboral empuja hacia áreas específicas, dejando otras en riesgo de desaparecer.
Reflexión final
Las carreras universitarias con mayor proyección laboral en Chile para los próximos diez años se concentran en salud, tecnología, ingeniería y sostenibilidad. No es casualidad: responden a transformaciones demográficas, digitales y ambientales que marcarán el rumbo del país.
La decisión de qué estudiar no puede basarse solo en cifras, pero ignorarlas sería ingenuo. La educación superior es una inversión de largo plazo, y elegir una carrera con alta empleabilidad es también elegir un futuro con menos incertidumbre. En ese cruce entre vocación y mercado se juega la vida de los próximos profesionales chilenos.
